La razón de la pregunta que nos consultan muchos pacientes «por qué me huele la boca» (conocido comunmente como halitosis), está estrechamente relacionado con las enfermedades periodontales, que afectan los tejidos de soporte del diente, como las encías, el ligamento periodontal y el hueso alveolar.
En condiciones de salud, la boca mantiene un equilibrio bacteriano adecuado; sin embargo, cuando se acumula placa bacteriana y no se elimina correctamente mediante una buena higiene bucal, las bacterias anaerobias comienzan a proliferar en las bolsas periodontales formadas entre el diente y la encía inflamada.
Estas bacterias descomponen proteínas y otros compuestos, liberando sustancias malolientes, como los compuestos sulfurados volátiles (CSV), responsables del mal olor.
A medida que la enfermedad periodontal avanza, la profundidad de las bolsas aumenta, creando un ambiente con poca oxigenación que favorece aún más el crecimiento de bacterias anaerobias patógenas. Estas bacterias no solo producen mal olor, sino que también generan toxinas que destruyen el tejido periodontal, empeorando la inflamación y el sangrado gingival.
Además, la acumulación de cálculo dental (sarro) facilita la retención de restos alimenticios y microorganismos, contribuyendo al mantenimiento del mal olor incluso después del cepillado.
Finalmente, la halitosis de origen periodontal no se soluciona únicamente con enjuagues bucales o el uso de productos cosméticos, ya que la causa es una infección bacteriana profunda.
El tratamiento debe centrarse en la eliminación del biofilm subgingival mediante la limpieza profesional que realizamos en MADALBI centro dental, raspado y alisado radicular, junto con una adecuada higiene oral diaria.
Solo al controlar la inflamación y reducir la carga bacteriana se puede eliminar eficazmente el mal olor asociado a la enfermedad periodontal.